Pocos problemas de salud causan tanta vergüenza como las hemorroides, pero la realidad es que la mayoría de la población experimenta algún tipo de incomodidad provocada por este padecimiento en algún momento de su vida. En términos generales, las hemorroides son la inflamación de las venas en el canal anal; además, las hemorroides, también conocidas como almorranas, pueden ser de dos tipos: internas o externas. Las internas, usualmente, no suelen causar ningún tipo de dolor, mientras que las externas pueden ocasionar comezón e inclusive dolor.

 La incomodidad provocada por las hemorroides en muchos casos pueden resolverse por sí misma o con tratamientos tópicos de venta libre; sin embargo, es de suma importancia tomar en cuenta que este tipo de tratamientos solamente se enfrentan a las incomodidades de los síntomas y no a la condición por sí misma, de modo que es fundamental que sepamos cuándo es necesario acudir con un especialista en hemorroides para prevenir que se conviertan en un problema de salud muy serio.

            La causa principal de la mayoría de las hemorroides es mucha presión en las venas, lo que provoca la inflamación e hinchazón. Esta presión excesiva en el recto normalmente es provocada por realizar demasiado esfuerzo al momento de hacer una evacuación o por levantar cosas muy pesadas, aunque otras condiciones también pueden provocarla, como la constipación crónica, la diarrea, la obesidad y el embarazo.

            En lo que concierne a los síntomas de este común padecimiento, uno de los más frecuentes es el sangrado durante la defecación; es posible notar sangre fresca y de color rojo brillante en la taza del sanitario o en el papel higiénico. Otros síntomas comunes son comezón en el área anal, inflamación en la misma zona y dolor o incomodidad, e incluso es posible llegar a notar una protuberancia cerca del ano.

            Como ya mencionamos, hay muchos casos de hemorroides o almorranas que no provocan mucha, si alguna, incomodidad, pero también hay ciertas situaciones en las que estas se vuelven extremadamente dolorosas e incluso pueden requerir tratamiento de emergencia por parte de un especialista en hemorroides. Un ejemplo de esto es cuando ocurre una trombosis hemorroidal, que ocurre cuando una hemorroide externa desarrolla un coágulo sanguíneo; en el caso de que esto ocurriera es fundamental acudir con un médico especialista, pues la única forma para aliviar este padecimiento tan doloroso es una incisión pequeña para remover el coágulo.

            Entonces, ¿cuándo es necesario acudir con un médico especialista en hemorroides? En primera instancia, lo más adecuado es que cualquier paciente se acerque a su médico la primera vez que perciban sangrado rectal en compañía de una protuberancia en el ano, pues, aunque lo más probable es que esto simplemente sea una hemorroide, también es posible que se trate de una situación más seria. Un médico especialista es el único que será capaz de diagnosticar correctamente a un paciente para descartar cualquier otra condición antes de comenzar un tratamiento contra las hemorroides, pues el sangrado rectal puede ser también un síntoma de enfermedades tan serias como el cáncer.

            Asimismo, las personas que sufren de hemorroides también deben acudir con un especialista certificado en padecimientos del colon, recto y ano en el caso de que experimenten dolor después de una semana de haber comenzado un tratamiento de venta libre. Las almorranas son un padecimiento que puede afectar severamente la calidad de vida de las personas, por lo que si un medicamento no alivia el dolor, es necesario acercarse a un médico que pueda tratar apropiadamente la aflicción.

            En este sentido, ir a una consulta con un proctólogo especialista ayuda a disminuir el riesgo de que las hemorroides sean recurrentes pues, desafortunadamente, se trata de una condición crónica que puede surgir una y otra vez si no se monitorea por un doctor.  Además de esto, existen varias complicaciones que pueden surgir si las hemorroides no reciben un tratamiento apropiado, como es el caso de las hemorroides estranguladas, término que significa que la hemorroide ha dejado de recibir sangre y, como resultado, hay necrosis del tejido, lo que provoca en los pacientes un dolor muy intenso.

            Como ya se ha ido explicando, para solicitar una consulta con un médico especialista en hemorroides no es necesario que los pacientes que sufren de almorranas experimenten padecimientos muy serios. En cualquier caso en el que se haya comenzado un tratamiento, como lo es el aumento del consumo de fibra, de agua y medicamentos de venta libre para aliviar los síntomas de esta condición, pero este tratamiento no de resultados satisfactorios, o si los síntomas desaparecen pero vuelven a aparecer al poco tiempo, lo más recomendable es hacer una cita con un médico.

            Asimismo, es muy importante que las personas acudan con un médico proctólogo si llegan a notar que sus heces fecales se vuelvan de un color negruzco o enrojecido; en el caso de que detecten un bulto o protuberancia dura que no se quita en el área rectal. Por otra parte, en el dado caso de que ya se les haya diagnosticado con un caso de hemorroides, es importante hacer una cita medica si hay dolor leve o moderado que dura por más de una semana después de comenzar un tratamiento, si el dolor o la inflamación se vuelven severos, si hay protuberancias en el tejido dentro de la cavidad anal que no vuelven a la normalidad después de una semana de tratamiento y si estas protuberancias dentro del ano aumentan de tamaño o se vuelven más dolorosas.

            Por otra parte, si el sangrado rectal aumenta o si cambia de color, por ejemplo, de rojo brillante a rojo obscuro, o si las heces fecales cambian significativamente de tamaño  forma o color, es fundamental acudir con un médico inmediatamente. Es importante que los pacientes sepan que el sangrado provocado por las hemorroides debería detenerse después de dos o tres días, por lo que si llega a suceder por más de una semana sin mejoría o si este se vuelve algo recurrente, especialmente si se trata de personas mayores de 50 años o si hay historia de cáncer de colon en su familia, deben acudir inmediatamente con un médico especialista en hemorroides.