Blog Proctologia Tijuana

Dr. Alberto Magaña

Información sobre las fisuras anales

En el caso de las personas que se encuentran en la necesidad de conocer sobre una fisura anal tratamiento, es importante conocer varias cosas sobre este padecimiento. En términos generales, podemos definir a una fisura anal como el desgarro o la rotura parcial de una parte del tejido que rodea al orifico exterior del aparato digestivo, el cual normalmente denominamos ano. Este tejido que se encuentra alrededor del ano se trata de un tejido mucoso que es significativamente más débil que la piel que se encuentra a su alrededor, por lo que se quiebra con mayor facilidad.

 Asimismo, las fisuras anales normalmente se localizan en la parte posterior del ano, esto ocasionado gracias a la propia naturaleza del tejido que forma al ano y al canal anal, pues esta suele ser una zona que tiene que recibir la mayor cantidad de presión en el momento de las evacuaciones y soportan mucha tensión cuando se contraen y relajan los esfínteres que abren y cierran el canal anal.

Por otra parte, en el caso de fisura anal tratamiento, se debe tomar en cuenta que estas se pueden clasificar de dos maneras distintas. La primera es de acuerdo a la forma en la que la fisura aparece, es decir, si esta ha estado presente por menos de seis semanas y nunca se había padecido de una fisura anal con anterioridad o, como mínimo, en los últimos dos años; en este caso, se considera que se trata de una patología aguda. En cambio, si el paciente sufre habitualmente de fisuras anales que siempre se encuentran en la misma zona, o si estas han persistido durante más de seis semanas, a pesar de un tratamiento médico, se considera que se trata de fisuras anales crónicas.

La otra forma de clasificarlas es a partir del origen que tienen las fisuras anales. Si se trata de una fisura ocasionada por factores mecánicos, o si su causa es desconocida, esta se denomina como fisura anal primaria o idiopática. Si, por el contrario, el paciente sufre de alguna enfermedad sistémica que tiene como consecuencia la aparición de las fisuras anales, estás serán consideradas fisuras anales secundarias.

Ahora, en lo que corresponde a una fisura anal primaria que se produce en un individuo sano, sin ningún tipo de patología sistémica importante, la causa más frecuente de este tipo de padecimiento es un traumatismo pequeño o la conjunción de varios traumatismos que finalmente terminan por dañar la mucosa anal y provocan que esta se desgarre.

Un ejemplo de esto bastante común de este tipo de fisuras se puede encontrar en pacientes que sufren de estreñimiento, pues esto puede ocasionar el daño repetitivo de la mucosa del ano. Por otra parte, también es posible que este daño sea ocasionado por una diarrea abundante y frecuente, la cual puede inclusive llegar a provocar una quemadura física por el contenido de las heces, la cual debilita la mucosa anal y causa un desgarro de este tipo.

En el caso de las fisuras anales secundarias, estas, como ya se ha explicado, ocurren en pacientes que sufren de alguna enfermedad sistémica que afecta al aparato digestivo y a la mucosa intestinal. Las enfermedades de este tipo más comunes son la Enfermedad de Crohn y la Colitis ulcerosa, la tuberculosis intestinal y enfermedades de transmisión sexual como la sífilis. En estos casos, los pacientes que experimenten fisuras anales, probablemente lo harán de manera crónica, pues son provocadas por una enfermedad crónica que provoca brotes frecuentes.

Ahora, cuando hablamos de fisura anal tratamiento, los síntomas más comunes que experimentan la gran mayoría de los pacientes que tienen fisuras anales, sin importar si estas son crónicas o agudas, son el dolor en la zona anal, la contractura del esfínter y el sangrado en el área del ano y el recto. El dolor, por su parte, suele ser muy característico puesto que normalmente comienza al principio de una defecación y se produce cuando se estiran las fibras que se encuentran alrededor de la fisura mientras las heces fecales transitan por el canal anal. Asimismo, el dolor comúnmente es sumamente agudo y puede durar varios minutos, incluso provocando una sensación de calor en la zona.

Además, la contractura del esfínter normalmente se hace presente durante todo el tiempo y se experimenta como una sensación de peso o molestia que es común en prácticamente todos los individuos que sufren de este padecimiento. Este dolor normalmente resulta en la contracción del esfínter, lo que impide la defecación, puesto que esta es la que provoca el dolor agudo, y el resultado es que el paciente sufra de estreñimiento, lo que a su vez endurece las heces y empeora el padecimiento.

Por su parte, el sangrado de las zonas del ano y el recto normalmente se produce por la fricción de la mucosa anal que está ulcerada y rota con el paso del contenido intestinal durante la defecación. Generalmente este sangrado suele ser escaso y de un color rojo intenso, lo que permite diferenciar el sangrado reciente de un sangrado crónico y consecuencia de un padecimiento intestinal más seria.

Ahora, en el caso específico de fisura anal tratamiento, como en la mayoría de los casos las fisuras son primarias, normalmente un tratamiento conservador da muy buenos resultados, el cual se basa en minimizar los traumatismos del área donde está la fisura y reducir la contracción del esfínter interno. Esto se consigue por medio de una dieta rica en fibra, pues esta permite fragmentar las heces para que sean más finas y pequeñas. Asimismo, suelen recomendarse los baños de asiento y el uso de pomadas con analgésico.

En el caso de que estos tratamientos no funcionan, antes de la intervención quirúrgica se puede administrar toxina botulínica en el esfínter interior para conseguir que se relaje y mejore el dolor que provoca el estreñimiento. Finalmente, si ninguno de estos fisura anal tratamiento funcionan será necesario recurrir a un tratamiento quirúrgico, normalmente con una esfinterotomía lateral interna, durante la cual se corta parcial o totalmente el esfínter anal interno en el lado donde está la fisura.

Dr. Alberto Magaña Reynoso

Médico especialista en Coloproctología avalado por la Universidad Nacional Autónoma de México, Más detalles

Hospital Ángeles. 5to. piso cons. No. 503

Ave. Paseo de los Héroes 10999,

Zona Río, Tijuana,

Baja California, México

Teléfono: (664) 635.1856
URGENCIAS: (664)374.5203

Servicios

Síguenos